Ya, ya sé que marea... pero es que el amor marea ¿o no?
Cuando
el objetivo central de nuestra vida es el amor... nos mareamos, porque
ese amor nos impulsa a desgastarnos, a entregarnos, a perdonar, a dejar
de lo nuestro, a vivir desde y para los otros... y eso... marea.
El túnel del amor no tiene fin. Siempre podemos amar más, siempre podemos disculpar más, siempre podemos darnos más.
Arriésgate y camina por ese túnel sin miedo, somos muchos los que necesitamos que te marees por amor.
Adéntrate
en tu corazón y descubrirás que el camino no es tan difícil como parece
y las satisfacciones son mucho mayores que el esfuerzo que realizas.
¡Ama!
Encar_AM
La
justicia social es un principio fundamental para la convivencia
pacífica y próspera, dentro y entre las naciones. Defendemos los
principios de justicia social cuando promovemos la igualdad de género o
los derechos de los pueblos indígenas y de los migrantes. Promovemos la
justicia social cuando eliminamos las barreras que enfrentan las
personas por motivos de género, edad, raza, etnia, religión, cultura o
discapacidad.
Para
las Naciones Unidas, la búsqueda de la justicia social para todos es el
núcleo de nuestra misión global para promover el desarrollo y la
dignidad humana. La adopción por la Organización Internacional del
Trabajo de la Declaración de la Organización Internacional del Trabajo
sobre la justicia social para una globalización equitativa es sólo un
ejemplo reciente del compromiso del sistema de las Naciones Unidas para
la justicia social. La Declaración se centra en garantizar resultados
equitativos para todos a través del empleo, la protección social, el
diálogo social, y los principios y derechos fundamentales en el trabajo.
La
Asamblea General proclamó el 20 de febrero Día Mundial de la Justicia
Social en 2007, al invitar a los Estados Miembros a dedicar este día
especial a promover, a nivel nacional, actividades concretas que se
ajusten a los objetivos y las metas de la Cumbre Mundial sobre
Desarrollo Social y el vigésimo cuarto período extraordinario de
sesiones de la Asamblea General.
La
celebración del Día Mundial de la Justicia Social debe apoyar la labor
de la comunidad internacional encaminada a erradicar la pobreza y
promover el empleo pleno y el trabajo decente, la igualdad entre los
sexos y el acceso al bienestar social y la justicia social para todos.
Jn 2,13-25
¿Jesús
se enfada alguna vez? Sí, se enfada. Más que enfadarse se pone triste
cuando ve los tinglados que armamos las personas. Y, sobre todo, lo que
no puede soportar es la injusticia y que se manipulen las cosas de Dios,
que a Dios se le ponga precio, cuando Él es toda gratuidad, donación y
amor. Dios es así porque ama así, porque el ser de Dios es la donación
hasta el extremo. Quizá no entendamos cómo es Dios, pero lo que está
claro es que nadie tiene la exclusiva o el copyright de su modo de
actuar.
Tampoco
Dios es barato o está de rebajas. Dios es como es. Y nosotros somos
como somos. Parezcámonos un poquito más a Él y menos a las “etiquetas
comerciales” de nuestro mundo.
Jesús
con esta escenita en el templo realiza lo que Patxi expresa con esas
tijeras: corta las maneras interesadas o de los que quieren sacar tajada
de la bondad de Dios. Dios es libre, corriente de amor, brisa suave… No
le pongamos triste con nuestras maneras de medir y de actuar.
|
|||
En ESTE ENLACE podéis descargar el calendario Litúrgico Pastoral
|
|||
Quiero ser capaz de dar comida a quien tiene hambre.
Quiero ser capaz de dar de beber a quien tiene sed. Quiero poder calmar las penas de quien está intranquilo. Quiero ofrecer reposo a quien está cansado. Quiero abrir mis puertas y ofrecer amor a quien está solo. Quiero ser tu hermano, Señor. Quiero ser realmente hermano de todos. Quiero atreverme a ir a visitar a quien está en la cárcel. Quiero saber cuidar a quien está enfermo. Quiero acoger a quien viene de cerca o de lejos, sea blanco o negro, que eso nunca me importe. Quiero estar dispuesto a tender mi mano a todo el que la necesite. Quiero ser tu hermano, Señor. Quiero ser realmente hermano de todos. Pero yo solo no puedo. Ayúdame, Señor, dame el amor que necesito para poder amar a los demás como tú los amas. |
jueves, 20 de febrero de 2014
Megapost Reflejos de Luz
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario