PIRÓMANOS...

"HE VENIDO A PRENDER FUEGO EN EL MUNDO, ¡Y OJALÁ

ESTUVIERA ARDIENDO!".  Lucas 12,4953.

No se trata de un fuego que extermina, que destruye, que causa la muerte.

Es como cuando el horno acrisola los metales para dejarlos libres de cualquier

clase de impureza. Es una acción benéfica, "dolorosa" pero necesaria.

La persona de Jesús provoca reacciones inesperadas. Quiere que las cosas

cambien, con él no se puede vivir el "más de lo mismo". Se presenta como
abanderado de una manera nueva de ser. Y , para su tiempo, y para ahora

mismo, suena a "revolucionario" su programa del REINO.

"YO SOY EL CAMINO"... AHORA NOS DICE QUE ÉL ES EL FUEGO.

Parece que como no nos interesan los cambios, tenemos mil maneras

de "apagar fuegos"... que todo siga igual. Que nuestras comodidades no

se sientan molestadas por criterios exigentes. Todo descafeinado, todo

"suave", nada de estridencias revolucionarias. "Los mismos perros,

pero con diferentes collares". Cambiar algunos detalles para que todo

siga igual. Y esto no puede ser en boca de Jesús.

"¡QUÉ ANGUSTIA HASTA QUE SE CUMPLA!".

Todo proceso de cambio es delicado. Puede ser angustioso el camino
a recorrer. Fuerzas poderosas que impiden cualquier movimiento

hacia la meta de la plenitud. Todas las personas inseguras estarán

alerta para que las situaciones conflictivas no se produzacan.

Jesús no es cómodo. Para seguirle hay que cambiar de ritmo

continuamente. Leva un paso cambiado. La divinidad que le habita

inflama a la humanidad una manera novedosa de vivir. Ya nada será

igual. Él ha puesto su fuego abrasador para a los seres humanos les

sea posible vivir de "otra manera". LLevar el fuego interior "quema".

Y el proceso, lo repetiremos, es angustioso. Incluso puede llegar
a ser dramático y violento. El cambio no gusta a la gente insegura.

Solo es itinerante el que va ligero de equipaje, sin dependencias.

"EN ADELANTE, UNA FAMAILIA DE CINCO ESTARÁ DIVIDIDA..."

No hace falta sino mirar a nuestro alrededor para ver cómo

la "madre está contra la hija y la hija contra la madre... la suegra
contra la nuera...". Un desastre total. Cada cual intentando dominar
a los demas y así no hay familia. No sería malo, ni mucho menos,

el revelarse contra quien intente dominar. El "obeceder" al

dictador nunca ha sido bueno, aunque parezca que hay paz.

"Matemos" al padre, al dictador.

FAMILIAS PELEADAS... VIOLENCIA DE GÉNERO..

Cuánta luz tiene que iluminar tanta debilidad.

Ser PROFETA es iluminar con FUEGO las situaciones de

injusticia que vive el mundo. A quienes hacen esto se les mata.

No interesan los profetas, como tampoco se valoró la postura

de Jesús. Incomodar, gritar, "quemar"... acrisolar, con mucho fuego,

las corrupciones para que una minoría no dicte como tiene que

vivir la inmensa cantidad de seres humanos invisibles.

HAY QUE SER PIRÓMANOS......AMÉN.

DEJARSE QUEMAR POR EL MENSAJE DEL REINO.

No poner obstáculos para que lo mejor de nuestra humanidad

pueda ser manifestada en toda su plenitud. Transmitir el calor

de lo divino. No apagar el fuego sagrado. "La llama vacilante..."

Se nota cuando una persona es habitada por el fuego divino,

no quema, solo da suave calor de hogar. Purifica ambientes.

Quita impurezas. Acrisola la vida. Construye.

Bomberos que van prendiendo fuego a la tierra y no apagando

los gritos de justicia que salen de milllones de gargantas.

"MARÍA SE PUSO EN CAMINO Y FUE APRISA
A LA MONTAÑA, A UN PUEBLO DE JUDÁ..."

En la ASUNCIÓN de María celebramos, con ella, lo que nosotros

también estamos llamados a vivir.

TODO EL SER DE MARÍA A LLEGADO A SU PLENITUD Y

SE HA IDENTIFICADO CON DIOS.

Que esto se haya hecho físicamente "en cuerpo y alma" no

debe ser entendido de manera literal. Indica solo la PLENITUD.

Nada escapa a la acción de Dios. Somos asumidos totalmente.

Celebrar con María el que para "Dios nada hay imposible".

La divinidad nos mete en la gran POSIBILIDAD, gozarle

totalmente. Nos hace unos con él. Tú y yo seremos llevados

por los mismo caminos que recorrió MARÍA. Aquí el FUEGO
lo que hace es que une lo humano con lo divino. Lo fusiona.
----------------------------------

Recordando unos versos de Teresa de Jesús.

"Si queréis que esté holgando,

quiero por amor holgar.

Si me mandáis trabajar,

morir quiero trabajando.

Decid, dónde, cómo y cuándo.

Decid, dulce Amor, decid.

¿Qué mandáis hacer de mí?"

La DISPONIBILIDAD NOS QUEMA. Hace que Jesús pueda

ser FUEGO  dentro de nuestra vida. Pasto seco para ser

abrasado por la divinidad. Fuego que da PLENITUD.

"PARA MEJOR ARDER ME APAGO".
---------------------------------

Jesús, meter tu fuego dentro de mis entrañas.

Dejarme quemar por tu vida llena de calor divino.
Ser FUEGO como tú... difícil manera de acercarme a mis hermanos-as.

Ya sé que no es cómodo seguirte. Quemas...

Pirómanos como Jesús, así tenemos que ser.

---------------------------------------

"¿QUÉ MANDÁIS HACER DE MÍ?"

S    H    A    L    O    M  .

 Padre Vicente Casañas o.p.