LONDRES, 10 Ago. 12 / 04:57 pm (ACI/EWTN Noticias).-
La atleta etíope Meseret Defar protagonizó uno de los momentos más emotivos de las Olimpiadas de Londres 2012 cuando al cruzar la meta en la final femenina de los 5000 metros planos y hacerse de la medalla de oro, sacó de su pecho una imagen de la Virgen María, la mostró a las cámaras y se la puso en el rostro en un momento de intensa oración.
Defar,
cristiana ortodoxa, encomendó su carrera a Dios con una señal de la
cruz y completó la distancia en 15:04:25, venciendo a su compatriota y
tradicional rival Tirunesh Dibaba, quien llegó como favorita de la
prueba.
Con lágrimas de emoción,
Defar mostró al mundo la imagen de la Virgen con el Niño Jesús en brazos
que la acompañó en todo el recorrido.
Durante
toda la carrera, tres corredoras etíopes y tres de Kenia se disputaban
los primeros lugares, Defar aceleró en el último tramo y logró separarse
del grupo.
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