sábado, 1 de diciembre de 2012

Comienza un tiempo especial: el tiempo de Adviento.
Un momento privilegiado para ser luz en la oscuridad, alumbrar caminos opacos, iluminar el camino de la verdad.
No te quedes en la penumbra, muchos necesitan  tu luz para descubrir el Amor que Dios nos ofrece a través de lo sencillo y lo pequeño.
La noche es noche porque oculta el brillo del sol, y da paso al día manifestando la grandeza de lo simple e insignificante.
Tú puedes ser luz para aquellos que se crucen contigo. Desde la humildad puedes decirle al mundo que no es más poderoso lo grande que lo diminuto.
Puedes ser luz que sonría a quien te mire.
Puedes ser luz que abra sus manos solidarias a quien lo necesite.
Puedes dar y recibir luz mirando con ojos misericordiosos la realidad sufriente del mundo.
Puedes ser luz para los desolados y desterrados.
Puedes encender la chispa del humor y del amor a quienes necesiten apoyo y consuelo.
¡No lo dudes! ¡Tú puedes ser luz para los demás!
Busca la forma de encender tu lámpara, arregla los desperfectos que te impiden alumbrar y siempre, siempre... SÉ LUZ.

Encar_AM

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